* Es vendedora de ropa y las ventas bajaron desde que inició la contingencia por COVID-19
APATZINGÁN, MICHOACÁN, A 5 DE JULIO DE 2020.- Desde que inició la contingencia por el COVID-19 poder llevar alimento a sus dos hijos ha sido difícil para Samantha Valle Mereda, habitante de Apatzingán, quien fue beneficiada con una despensa del Plan Emergente Michoacán Alimenta.
Samantha, vendedora de ropa en paca, como ella misma lo refirió, platicó lo difícil que le resulta vender su producto desde que se dio, en el mes de marzo, el primer caso de coronavirus en Michoacán, ya que las personas dejaron de interesarse en comprar ropa, por temor a contagiarse.
Su esposo por otro lado, trabaja en una panadería que entrega especialmente a centros escolares, otro problema más porque desde marzo se suspendieron las clases en todo el territorio michoacano, y eso se ve reflejado en su salario, platicó.
«Gracias a Dios no nos hemos quedado sin trabajo, pero como nos toca rentar eso se nos puso algo difícil con los pagos, pero allí la llevamos, poquito de aquí y poquito de allá», dijo.
Samantha manifestó su alegría por recibir un apoyo de Gobierno del Estado ya que hasta ahora, nunca había logrado ser beneficiaria en ningún Gobierno.
«La verdad me apunté porque me dijeron mis tías, nunca me había llegado apoyo de nada, mi mamá me avisó también, y gracias a Dios que sí se dio, ahorita como está de difícil la situación nos viene de gran ayuda», expresó.