Lamberto HERNÁNDEZ MÉNDEZ/ URUAPAN, MICH./ VIE-10-JUN/ Los aguaceros de mayo quedaron para la historia; la deforestación y ecocidio al planeta, han ocasionado que cambien las temporadas de lluvia, ahora el 10 de junio fue testigo de la primera lluvia de la actual temporada; unas enormes y negras nubes “aborregadas” venían de allá del rumbo del cerro de La Cruz, a gran velocidad y fuertes vientos, esporádicamente algunos rayos eléctricos se escuchaban estruendosos. En pocos minutos Uruapan estaba prácticamente cubierto por esas nubes que poco a poco fueron dejando caer las gotas de lluvia.
10 de junio no se olvida. También fue el primer aguacero de éste año, ráfagas de viento que hacia ladear los árboles que dejaban caer sus flores, hojas y ramas secas sobre el piso y los automóviles que circulaban a vuelta de rueda por las calles y avenidas de la ciudad.
Frías gotas de agua caían sobre las cabezas y hombros de cientos de personas que fueron sorprendidos por la lluvia, no estaba programada ni el pronóstico del tiempo lo había anunciado.
Poco después de las 19:00 horas empezó la lluvia que azotó por más de una hora; la noche cayó pero ni se notó por la obscuridad de las negras nubes, poco a poco las personas se fueron recogiendo a sus respectivos domicilios, a eso de las nueve de la noche, el centro y varias calles lucían prácticamente desiertas, fantasmales, sólo algunas lámparas alumbraban lángidamente y el frío calaba cada vez más y más, mientras transcurrían las horas.