Lamberto HERNÁNDEZ MÉNDEZ/ URUAPAN, MICH./ MAR-10-MAY/ Lo que sería un feliz encuentro, un día de las madres especial, a punto estuvo de convertirse en una verdadera tragedia cuando una mujer, adicta a las bebidas embriagantes, determinó morir éste día y cuando era presa de una congestión alcohólica, fue encontrada por su hija, de 15 años de edad, quien iba a visitarla y le llevaba su regalo y la encontró en la banqueta e inconsciente. La mujer permanece en el hospital.
Élida Solorio Pérez, de 45 años de edad, vive en la prolongación de la calle Francisco Villa de la colonia Lindavista, al norte de la ciudad, es adicta a las bebidas embriagantes desde hace varios años y éste 10 de mayo, salió desde temprana hora, según manifestó su esposo José Antonio Esqueda, a quien le comentó que éste día le gustaba para morir, pero no le dio mayor importancia y se fue a trabajar.
Al mediodía fue notificado que a una cuadra de su casa, sobre la banqueta, estaba tirada, inconsciente y emanando bastante líquido de la boca, algunos vecinos solicitaron el apoyo de una ambulancia de Rescate y Salvamento que la trasladó al Hospital Regional.
Poco antes, su hija Alejandra Sarahí, de solamente 15 años de edad, iba a visitarla, llevaba en sus manos el regalo del Día de las Madres y a su pequeña hija de solamente cuatro meses de edad, quien aún no es bautizada y antes de llegar, se encontró a su mamá tirada en la banqueta, estaba siendo víctima de una congestión alcohólica. El Día de las Madres fue amargo.