EL/ INFOMANIA/ URUAPAN, MICH./ LUN-09-MAY/ Una forma de aminorar la tala ilegal es mediante la promoción de los productos no maderables que generan los bosques señaló José Alfredo Molina Vázquez, director de la Escuela de Guardas Forestales, al presentar el recetario de hongos tipo seta elaborado por Berenice Celia Cuevas González, del Centro de Formación Forestal de Ciudad Guzmán Jalisco.
Señaló que el Programa de Ecotecnias surgió en 2005 como una foram de contribuir a elevar el nivel de vida de los pobladores de la comunidades forestakes del país con tecnologías amigables con el medio ambiente como: Construcción de cabañas con pacas de paja, elaboración de carbón vegetal, estufas ahorradoras de leña, lombricompostaje, hongos comestibles y medicinales.
En la conferencia, impartida en la XII Feria Nacional del Libro, habló también Guillermo Rauda, encargado de los módulos demostrativos de ecotecnias, quien expuso los pasos que se desarrollan para cultivar hongos para consumo familiar o como un proyecto productivo que genere ingresos para grupos solidarios o como autoempleo.
El técnico comentó que los hongos setas más conocidos corresponden al género Pleorotus, comúnmente llamados orejas, que poseen aminoácidos esenciales como la Lisina, son fuente de carbohidratos, aportan fibra, son bajos en grasas, contribuyen a disminuir los niveles de colesterol, fortalecen el sistema inmunológico, controlan la presión arterial, son vigorizantes y tienen cierto efecto antiviral y antibacterial.
En el caso del recetario, la autora, Berenice Celia Cuevas González, explicó que se trata de la primera edición hay 47 recetas sencillas a base de hongos setas, shitake y champiñones, que son fáciles de elaborar, de bajo costo y con los ingredientes más populares que los hacen atractivos para el consumo.
El primer tiraje fue de 10 mil ejemplares de distribución gratuita a cargo de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), que se entregan al público interesado en las degustaciones que se hacen para promover este tipo de alimentos.
CIFRAS Y DATOS
El inóculo, es decir la “semilla” del hongo se vende de 60 a 80 pesos el kilo.
Esta cantidad sirve para producir de 30 a 40 kilogramos de hongo para consumo
Se utilizan esquilmos (residuos) de cosechas como la paja de trigo, virutas, aserrín, bagazo de caña de azúcar.
Para producirlo es necesario un cuarto cerrado a la luz para que se desarrolle el hongo.
La Escuela de Guardas Forestales ofrece cursos a los grupos interesados, en horarios flexibles.