FERNANDO S. RAZO/ URUAPAN, MICH./ JUE-09-SEP/ No cabe duda que la invasión del Zapién ha desviado los reflectores mediáticos, especialmente de esta ciudad y municipio de Uruapan, respecto al rescate del centro histórico.
Pero menos justo es que líderes sin escrúpulos, perversos y ocultos tras las acciones de esa gente organicen y manipulen actos vandálicos que dañan al Río Cupatitzio, lastimando el patrimonio de los uruapenses.
¿Por qué invadir el Zapién? La respuesta a esta pregunta debe desenmascarar a quienes merecen la aplicación de la Ley con todo su rigor. PREOCUPA QUE NO HAYA PRECEDENTE DE CASTIGO A ESTE RESPECTO.
Comprobadamente estos rapaces individuos se han salido con la suya porque las autoridades, inclusive, les han ayudado comodinamente a conseguir su empeño.
Podemos hacer un buena lista de lo que históricamente ha sido este tipo de prácticas en Uruapan y no con mucha dificultad se pueden identificar a quienes estuvieron dirigiendo esos movimientos y, lo más triste, se salieron con la suya.
¿No nos dice nada el deslinde de las 240 hectáreas declaradas Zona de Protección?
Recuerden que una propietaria de esos terrenos fraccionó su propiedad, realizó estudios amañados de impacto ambiental, teniendo todo listo para que Antonio Lagunas y sus levantadedos en turno le aprobaran el cambio de uso del suelo. Pero en ese tiempo les fallaron sus cálculos, cuando la asociación Rescate del Río Cupatitzio, A.C. organizó una manifestación de rechazo que evitó la instauración de ese “cáncer habitacional”.
Ya se tenían compromisos con aquellos a quienes se les vendieron esos lotes y que estuvieron prestos a manifestar su apoyo para ese proyecto. ¿Lo recuerdan?
La sociedad civil les impidió, como ahora debe suceder, que consumaran una arbitrariedad orquestada con la complicidad del gobierno municipal y estatal en turno.
¿Ustedes creen que esos propietarios se han resignado a perder el negocio redondo que les iba significar esa transacción? Seguro que ahora pueden estar echando la carne al asador porque invirtieron y el negocio se les fue de las manos.
Reconozco el discurso de Antonio González cuando habla de rescatar esas tierras de los ilegales invasores y en los hechos lo ha evidenciado. Pero ¿en verdad tiene el apoyo real del Gobierno del Estado? Su mismo asesor jurídico, Lic. Camarena, mencionó que notó en el Ministerio Público una resistencia en atender el asunto de las demandas de invasión. ¿Eso es en lo hechos aplicar el Estado de Derecho?
Se argumenta que Fidel Torreblanca nunca quiso decir lo que dicen que dijo (no vamos a recurrir a la fuerza). ¿Por qué el Secretario de Gobierno tendría interés en evitar la aplicación de la Ley? ¿Se le caerían los méritos para ser candidateable?
El interés por el asunto debe causar escozor a los implicados que pudieran ser actores visibles u ocultos de esta trama, por los beneficios o perjuicios políticos que avizoran.
Los invito a manifestarnos organizadamente contra este delito ambiental.
Ing. Fernando S. Razo
