Adrián José Morales Lara, vivía en la colonia Los Ángeles.
Marcela Alejandra Solorio Tungüí, vivía en Llanos de La Magdalena.
Lamberto HERNÁNDEZ MÉNDEZ/ URUAPAN, MICH./ VIE-23-JUL/ La pareja que había sido secuestrada y ejecutada, cuyos cuerpos fueron localizados en avanzado estado de putrefacción a un costado de la carretera estatal que conduce a Zirimícuaro, en el municipio de Ziracuaretiro, fueron identificados, uno era comerciante y la mujer cultora de belleza.
Se trata de quien en vida respondía al nombre de Adrián José Morales Lara, de 29 años de edad, quien tenía su domicilio en la calle Amsterdam número 1221, en la colonia Los Ángeles; la mujer se llamaba Marcela Alejandra Solorio Tungüí, quien vivía en la calle Río Carrizal número 36 en Llanos de la Magdalena, en esta ciudad.
Los cuerpos de estas personas, fueron hallados la tarde de este jueves a la altura del lugar conocido como La Herradura, a unos cinco kilómetros de esta ciudad, sobre la carretera estatal a Ziracuaretiro; tenían al menos ocho días de haber sido asesinados.
El hallazgo se derivó de las investigaciones de la sección antisecuestros de la PGJE que sostuvieron un enfrentamiento a balazos y granadas, la madrugada del jueves en las inmediaciones del Cereso, al oriente de la ciudad, donde dos elementos policiacos resultaron lesionados.
LOS SECUESTRADORES
Eduardo González Pardo (a) “La Changa”, de 18 años, vecino de Nueva Italia; Pedro Alejandro Bernabé Álvarez (a) “El Quillo”, de 21 años, de Uruapan; Omar Geovanni Quezada Mendoza (a) “El Nalgón”, de 21 años, de Uruapan e Ismael Moya Romero “El Güero”, de 17 años, de Nueva Italia, han sido consignados por secuestro, homicidio, extorsión y otros delitos.
LOS HECHOS
Las dos víctimas circulaban a bordo de un automóvil Honda por el libramiento y a la altura del mercado de abastos fueron interceptados por los secuestradores, tras amagarlos, los obligaron a abordar otro vehículo y los llevaron a una casa de seguridad del Infonavit Aeropuerto, en donde los mantuvieron atados de pies y manos y amordazados.
Pretendían cobrar de rescate 500 mil pesos. Dos días después llevaron a la pareja por el rumbo de Zirimícuaro, en donde los ejecutaron de un balazo en la cabeza a cada uno. Luego de asesinados, cobraron 330 mil pesos como rescate, pero los familiares de las víctimas al ver que no regresaban los rehenes, denunciaron el secuestro.
Los detenidos confesaron dos secuestros más, uno de ellos, Andrés Madrigal Figueroa, un estudiante de la Facultad de Agrobiología y, José Chávez Valencia, a quien asesinaron de igual manera, rumbo a Taretan. Siguen las investigaciones.