Simulaba estar recargado en un horcón de una enramada.
Lamberto HERNÁNDEZ MÉNDEZ/ URUAPAN, MICH./ JUE-20-MAY/ Como si estuviese vivo, parado y recargado en un horcón que sostiene una enramada de su casa, un jornalero permaneció durante varias horas en esa posición, sin vida, sostenido del cuello con un lazo, mientras que su hermana realizaba las labores normales hasta que le causó extrañeza que estuviera inmóvil y sin pronunciar una sola palabra; al acercarse, grande fue su sorpresa al descubrir que estaba rígido, frío y sin signos vitales.
La víctima respondía en vida al nombre de Víctor Ochoa Sandoval, de 55 años de edad, originario y vecino de la ranchería de Cupuancillo perteneciente al municipio de La Huacana, lugar donde tuvieron lugar los hechos.
Una hermana del ahora extinto, de nombre Ma. de los Ángeles, dijo que como todos los días, se levantó a las 5 de la mañana al sonar el despertador y se dispuso a realizar sus labores del hogar, apenas amanecía y descubrió la silueta de su hermano recargado en un horcón que sostiene una enramada, situación común para ella.
No le dio mayor importancia y siguió en sus labores, hasta las 8 de la mañana en que se le hizo raro que su hermano no se moviera de la misma posición en que estaba y mucho menos pronunciara palabra alguna por lo que se acercó y grande fu su sorpresa al percatarse que estaba rígido, frío y sin signos vitales, tenía atado al cuello un lazo y el otro extremo a una trabe sostenida por el horcón de la enramada. Dice ignorar las causas por lo que se ahorcó.